Envejecer no significa dejar de conducir, pero sí implica hacerlo con mayor precaución. En España, conducir a partir de los 65 años requiere renovar el carnet cada cinco años, y desde los 70, cada dos. Este control incluye exámenes psicotécnicos para evaluar reflejos, visión y estado general de salud (Fuente: DGT, El Confidencial). Aunque no existe una edad máxima para conducir en España, la normativa busca garantizar la seguridad vial de los mayores y del resto de usuarios.

Según datos de la Fundación Línea Directa, los conductores mayores de 65 tienen un 12% más de probabilidades de verse implicados en accidentes mortales. La reducción de reflejos, la pérdida de agudeza visual o el uso de medicación habitual pueden influir en la conducción. Algunos consejos para conductores mayores incluyen evitar trayectos nocturnos, planificar rutas tranquilas y realizar revisiones médicas frecuentes para mantener la seguridad personal y colectiva.

No todos envejecemos igual. Mientras unos mantienen sus capacidades intactas a los 75, otros pueden experimentar dificultades antes. Por eso, más allá de la normativa, conviene realizar una autoevaluación honesta y periódica. Consultar con especialistas, atender a las recomendaciones de familiares y ser conscientes de los límites es clave para una conducción segura. La seguridad vial en mayores es una responsabilidad compartida.

Desde Ágora Broker ofrecemos seguros adaptados a cada etapa de la vida, con coberturas específicas y asistencia pensada para quienes siguen conduciendo con experiencia, pero también con responsabilidad. Porque seguir conduciendo después de los 65 es posible, siempre que se haga con prudencia, conciencia y apoyo profesional. Renovar el carnet de conducir siendo mayor es solo un trámite; lo importante es renovar el compromiso con la seguridad.

Escríbenos